Un paseo por La Sierra de Grazalema desde Benaocaz

Alicia, Fernando, Mari Carmen

Salimos del pueblo ya entrada la mañana, Alicia, Mari Carmen y yo mientras atravesábamos un entramado de calles estrechas pavimentadas por cantos rodados de la zona y muretes semiderruidos construidos según la técnica de la arquitectura en seco, piedra sobre piedra sin ningún tipo de argamasa, muy común a lo largo del Mediterráneo,

en lo que fué la Benaocaz Nazarí.., y es que esta población ( بن عكاظ) "Casa del Mercado" fue aldea fundada en el 715  por los árabes de Ṭāriq Benzema ibn Ziyād al-Layti  

طارق بن زياد .,el general que dirigió la conquista musulmana de la península ibérica, aunque no fueron los primeros, pues existen vestigios de asentamientos humanos muy anteriores...

Estamos a 6 de Septiembre y es verano todavía pero pese a la ausencia de actividad hidrológica, se aprecia en la cantidad de cauces ajados por el estío, que es ésta, zona muy húmeda recorrida por numerosos arroyos y manantiales en época de lluvias...Tras pasar una cancela y caminar indiferentes, con disimulo, aunque mirando de reojo a varias reses sueltas de gran tamaño que pastaban allí dentro,

Un inicio muy duro

emprendimos un pronunciado ascenso hacia la Sierra del Caíllo atravesando en la subida, La Cañada Real Del Puerto a Campobuche, detrás el pueblo iba quedando a cada paso más abajo, lejano, entre el eco sagrado que producían las campanas llamando a la oración desde lo que otrora fué alminar y emulando de ese modo, la voz del muecín, del almuédano clamando a los fieles en sacro menester, a devota obligación... Partimos desde una altitud  de 793m, pero excasamente tras un kilómetro recorrido y una trepada literalamente vertical sobre una pared, ya habíamos alcanzado los 1000 mts..y la cuerda del Cintillo,

debido a que la Sierra de Grazalema está formada por roca caliza el paisaje que se nos mostraba en un continuo ascenso estaba gobernado por los fenómenos Kársticos, 

un relieve que resulta de la descomposición de los minerales y un tipo de rocas sedimentarias, estas son; Calizas y Dolomías,

de manera que atravesaríamos torcales, subiríamos, recorriendo lapiazes, bajando a cañones profundos desde los que en la subida para atravesar dolinas, veríamos en sus paredes las entradas a las cuevas que forman el propio proceso...

Dos Ases de la montaña

Pasando la ladera de la Cima, perteneciente a la Sierra del Caíllo la humedad del ambiente era elevada y pese a que no hacía calor se sudaba abundantemente endureciendo más si cabe el fatigoso recorrido, ya de por si penoso, fue gracias a la constancia en el caminar ascendente lo que nos permitió superar esta rampa y atravesar con éxito El Navazo Alto.

Mari Carmen escalando

La climatología se tornó benévola con nosotros, cubriéndonos el sol a ratos por el tránsito de nubes que traían el viento del suoreste,

Alicia en su ascenso al final de una pared

lo que nos permitió encarar el descenso al Navazo Hondo con comodidad dentro de la suma de esfuerzos realizados hasta ese momento, refrescándonos en la recuperación que suponía la bajada.....el zig-zagueo descendente nos tonificaba en una adición de movimientos diferentes a la vez que, hasta contribuyó para calmar nuestras pulsaciones la visión pacificadora de un rebaño de cabras transitando placidamente por la llanura del Navazo....

Trepada

Una vez atravesado y tras pasar una puerta nos adentramos en un bosque de pinos, encinas y acebuches  dónde de nuevo subiríamos por Peralta en un interminable y huidizo sendero que se nos complicaría en más de una ocasión, embutiéndonos entre moles de roca talladas caprichosamente.. 

Navazo Hondo

Hecho un alto en el camino para comer seguiríamos ya en monótono ascenso siempre hasta el Simancón, interrumpido solo al final del sendero de Peralta pasado un pequeño puerto, hasta el tramo que suponía el ascenso por la ladera del Simancon en su vertiente Sur....

La Cartografía y la brújula es fundamental

Encaramarnos al Collado cada vez se convertía en una tarea más ardua..., la digestión en pleno proceso, un cielo enmarañado, plomizo y pesante, unido a que no corría ni la más mínima brisa hacían de cada paso en progresión ascendente todo un logro a celebrar como si de un gran triunfo se tratase....el grupo en línea,  permanecía disciplinado avanzando al unísono esquivando obstáculos, no había quejas, solo concentración para conseguir alcanzar el Collado del Simancón....

Llegando al Collado del Simancón

y como siempre con la voluntad y constancia que requiere la superación de cualquier obstáculo, por fin lo alcanzamos, no hubo ningún gesto especial de complacencia porque todavía nos quedaban kilómetros de desnivel ascendente y descendente que librar, 

Alicia

así que con la misma instrucción y obediencia a las señales de la naturaleza que nos habían llevado hasta allí, seguimos rumbo norte hacia Navazuelo por un paisaje de derrubios producto de la meteorización buscando la Sierra del Endrinal...con zancada segura y una vez atravesado el precioso bosque llegamos a los Llanos del Endrinal, 

Mari Carmen

dónde se produciría el punto de inflexión y retorno hacia el sur en progreso desde los 1058mts hasta los 1260 mts de el Puerto de las Presillas, caminaríamos en incesante regateo rodeando la Sierra del Endrinal pasando junto al pozo de las nieves, signo alentador de que el puerto se encontraba cerca..aun nos quedaban fuerzas para demostrarnos a nosotros mismos que alcanzaríamos como así ocurrió sin tan siquiera una queja el Dornajo, dejando atrás Navazuelos Fríos. 

El poder de la Amistad

Las ruinas del Cortijo del Dornajo, fueron testigos de como trepidántemente tomamos unos de los cauces de una rambla del que luego tomará el agua para engrandecimiento de su cauce, el Arroyo Del Pajaruco...bajamos hasta los 970mts para atravesar el Arroyo de las Piletas entre moles gigantes de cantos rodados y bosques de encinas solitarias de cuyas hojas comía alguna que otra cabra..

Alimentándose

llegamos al nacimiento del Arroyo Pinarejo y bordeamos dejando a nuestra izquierda un saliente de Fardela, las zarzas como parte de la vegetación del bosque en galería constituían el elemento hostil porque nos dificultaba el paso y escondía el camino, que descubríamos apartando tan incómodo escaramujo, a golpe de bastón o con el pie... atravesado el lecho del Arroyo Del Pajaruco, 
 y lejos de que el cansancio hubiera lastimado el ánimo el regocijo iba en aumento al comprobar que la durísima travesía iniciada ocho horas y media antes estaba llegando a su fin, 

Tesón

del silencio envolvente de la Serranía tras salvar un saliente, apareció de repente el rumor humano y la vista inminente del pueblo de Benaocaz,

Reflexión

 el Arroyo del Señorito fue la línea de meta mientras resbalábamos por una empinada cuesta con la inmensa satisfacción de la plenitud que proporciona el objetivo cumplido.

Misión Cumplida